Una llama azul indica que tu cocina está funcionando de manera correcta y segura. Pero si notas que cambia a un tono amarillo o rojizo y, además, hace ruidos extraños, es una señal de alerta; los quemadores o inyectores necesitan limpieza y mantenimiento, lo que debe ser realizado exclusivamente por técnicos de gas acreditados en la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC).
Ignorar esta advertencia podría ser riesgoso, ya que significa que tu cocina no está funcionando de forma correcta y segura. Una combustión deficiente o un artefacto en mal estado pueden generar distintos riesgos:
- Fugas de gas: Provocadas por desgaste, falta de mantenimiento o conexiones defectuosas, que ponen en peligro la seguridad de tu hogar.
- Monóxido de carbono (CO): gas invisible, sin olor y altamente tóxico; se produce cuando la combustión en un artefacto es incompleta, pudiendo causar intoxicaciones graves.
- Accidentes domésticos: un artefacto en mal estado puede generar situaciones peligrosas que se previenen con revisiones periódicas.
¿Cómo prevenir estos riesgos?
- Revisa tus artefactos periódicamente y asegúrate de que la llama sea siempre azul.
- Realiza mantenimientos regulares con un técnico acreditado en la SEC.
- Asegúrate de que todos tus artefactos a gas cuenten con sello SEC vigente.
- Revisa reguladores, mangueras, flexibles y conexiones: asegúrate de que cuenten con sello SEC vigente y considera la fecha de vencimiento indicada por el fabricante.
Prestar atención a estas señales simples te ayuda a prevenir accidentes, proteger a tu familia y mantener un hogar más seguro.
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